Quien trabaja con importación o exportación de alimentos perecibles sabe que cada etapa logística exige precisión, control y estrategia. En estas circunstancias, hay una alternativa inteligente que puede facilitar el día a día de las operaciones internacionales y hasta generar economía: el depósito de aduana.
En este contenido vas a comprender cómo funciona, cuáles son los tipos disponibles, quién puede utilizarlo, y, principalmente, de qué forma este régimen especial puede transformarse en un diferencial competitivo para tu empresa. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es un depósito de aduana?
El depósito de aduana es un régimen especial que permite a importadores o exportadores almacenar alimentos perecibles, nacionales o extranjeros, en locales dentro de la aduana, con suspensión de tributos federales.
Este almacenamiento puede ocurrir antes de la nacionalización de la carga (en el caso de importaciones) o antes del envío al exterior (en exportaciones).
Durante el período en el cual los perecibles permanecen en el depósito, determinados impuestos no son cobrados.
¿Qué tipos de depósito de aduana existen?
Hay dos tipos principales de depósito de aduana, según la naturaleza de la operación:
Depósito de aduana en la importación
Permite almacenar alimentos perecibles importados en recintos aduaneros con temperatura controlada, como los de Emergent Cold LatAm, manteniendo la suspensión de los tributos hasta que el importador decida nacionalizar los productos o reexportarlos.
Es ideal para aquellos que necesitan esperar resultados de análisis de laboratorio, ajustes regulatorios, oportunidades comerciales o mejor cotización cambial, sin comprometer la integridad de la carga.
Depósito de aduana en la exportación
Permite el almacenamiento de alimentos producidos en Brasil antes de enviarlos al exterior, garantizando control de calidad, frescura y organización logística.
Las empresas que exportan en grandes volúmenes o de forma fraccionada se benefician de este régimen porque centralizan existencias, optimizan rutas y cumplen exigencias sanitarias y aduaneras más eficientemente.

¿Qué mercaderías pueden permanecer en depósitos de aduana?
Los siguientes productos pueden ser almacenados en depósitos de aduana:
- productos industriales y materias primas;
- mercaderías destinadas a exportación;
- productos importados que todavía no fueron nacionalizados;
- ítems que necesitan análisis de laboratorio o certificaciones antes de ser liberados.
Los productos en régimen de depósito de aduana deben ser almacenados en recintos aduaneros autorizados por la autoridad aduanera local, organismo fiscal federal, que ofrecen control de acceso, vigilancia 24 horas y sistemas de monitoreo.
Estos recintos pueden ser públicos o privados:
- Almacén de aduana público — a pesar de la denominación público, también puede ser operado por una empresa privada, que atiende a cualquier empresa que realice operaciones de importación o exportación;
- Almacén de aduana privado — operado por empresas privadas, como Emergent Cold LatAm. Atiende solo clientes específicos y puede ofrecer infraestructura más especializada, ideal para segmentos como el de alimentos perecibles.
¿Cuáles son las principales ventajas del depósito de aduana?
Adoptar el depósito de aduana puede proporcionar una serie de beneficios logísticos y financieros para las empresas. Estos son los principales:
1. Suspensión del pago de tributos
Una de las mayores ventajas del depósito de aduana es la suspensión temporaria de impuestos como II, IPI, PIS, Cofins e ICMS. Esta suspensión está vigente mientras la mercadería esté almacenada en el depósito, ya sea para importación o exportación.
Esto significa que el empresario no necesita desembolsar tributos de inmediato, evitando impactos de caja y permite más tiempo para decidir si nacionalizará o reexportará la carga. Esto es especialmente útil en períodos de variación cambial.
2. Optimización del flujo de caja
Como los tributos se pagan solo en el momento de nacionalizar la mercadería, el depósito de aduana permite una planificación financiera más eficiente. La empresa gana tiempo para organizar sus finanzas, validar contratos de venta y hasta buscar mejores oportunidades de mercado.
Esta previsibilidad en el desembolso de valores altos contribuye directamente a la salud de los recursos monetarios, haciendo posible destinarlos a otras prioridades, como la compra de nuevos insumos, ampliación de la producción o a inversiones con infraestructura.
3. Flexibilidad en las operaciones
El régimen aduanero especial ofrece una gran ventaja operacional: la flexibilidad. La empresa puede desembarazar la carga poco a poco, según su necesidad, facilitando la logística y la planificación de existencias.
También es posible reexportar productos que no fueron vendidos o transferirlos entre recintos aduaneros.
Esta versatilidad es especialmente útil para aquellos que trabajan con perecibles (carnes, legumbres, frutas, lácteos, etc.), que exigen rapidez en el envío, o para los que venden por encomienda en los mercados interno o externo.
4. Reducción de costos de almacenaje internacional
Mantener mercaderías almacenadas en puertos o almacenes en el exterior puede ocasionar costos elevados, sobre todo cuando hay atrasos o necesidad de aguardar liberación comercial.
Con el depósito de aduana, es posible traer esa carga a Brasil, y dejarla en una estructura aduanera, reduciendo significativamente los gastos de almacenaje internacional. Además, la cercanía con el punto de distribución final reduce el tiempo de tránsito, evita deterioración de alimentos perecibles y acelera las decisiones logísticas.
5. Conveniencia para empresas exportadoras
Las empresas que exportan productos nacionales o nacionalizados también se benefician del depósito aduanero. El régimen permite acumular y organizar la carga en territorio nacional antes del envío al exterior.
Esto es especialmente ventajoso para exportaciones fraccionadas o en grandes volúmenes, porque facilita el control de existencias, agrupar pedidos y cumplir plazos internacionales. La estructura de los depósitos también garantiza seguridad y control aduanero hasta el momento del envío.
¿Cómo funciona la gestión logística en un depósito aduanero?
Para funcionar bien, la logística del depósito aduanero exige control estricto de documentación, rastreabilidad de productos, sistema de gestión aduanera e integración con transportadoras y agentes de aduana.
En este escenario, disponer de tecnología, experiencia en comercio exterior y conformidad con las exigencias de los organismos fiscales es fundamental. Por eso, obtener un aliado logístico con estructura especializada para depositar las mercaderías dentro de la aduana es la mejor manera de añadir eficiencia, agilidad y seguridad a tus procesos.
¿Cómo puede ayudarte Emergent Cold LatAm?
Emergent Cold LatAm ofrece soluciones integradas en almacenaje y transporte con temperatura controlada, ideales para las empresas del sector de alimentos perecibles que dependen de gran confiabilidad logística.
Con recintos aduaneros modernos y autorizados para operación como depósitos de aduana, logramos:
- garantizar almacenamiento seguro y con temperatura controlada;
- ofrecer sistemas avanzados de rastreo y gestión de inventario;
- ofrecer equipo experimentado en procesos aduaneros y logísticos;
- proporcionar consultoría personalizada para importadores y exportadores;
Además, subrayamos que cumplimos las exigencias de organismo fiscales y de regulación nacional e internacional.
Toda nuestra estructura está preparada para reducir costos, evitar desperdicios y aumentar la agilidad de las operaciones de comercio exterior.

Conclusión
El depósito aduanero es una herramienta poderosa para empresas que desean conquistar competitividad en comercio exterior.
Al suspender tributos y ofrecer flexibilidad en el desembarazo de los alimentos perecibles, ese régimen aduanero permite mejorar el flujo de caja, planificar con más eficiencia y reducir riesgos en las operaciones de importación y exportación.
Con una gestión logística profesional y el apoyo de una estructura moderna como la de Emergent Cold LatAm, tu empresa puede transformar el depósito aduanero en un diferencial estratégico para crecer en el mercado global.